El prefiltro es un elemento esencial del tanque séptico. Instalado en su salida, es obligatorio en Québec desde 2009 para todos los tanques prefabricados. Su función principal es retener las partículas sólidas para proteger el sistema de tratamiento —como los de Bionest— y así prolongar la vida útil de la instalación séptica.
Incluso con un buen tiempo de sedimentación, siempre pueden llegar sólidos al efluente. Esto puede deberse a:
- la resuspensión de partículas,
- la degradación de la nata superficial, o
- el uso inadecuado del inodoro (toallitas húmedas, condones, etc.).
El prefiltro evita que estos sólidos alcancen el sistema de tratamiento o el elemento de filtración.
Problemas que puede causar un prefiltro obstruido
Con el tiempo, el prefiltro puede bloquearse parcial o totalmente, lo que provoca diversos problemas:
- Un prefiltro tapado puede impedir la salida del agua del tanque, haciendo que el nivel suba. Esto puede:
- Permitir que el agua cargada de partículas y grasas pase por encima del prefiltro hacia el campo de filtración, reduciendo su vida útil; o
- Provocar el reflujo de aguas residuales hacia la vivienda.
- Una mala ventilación causada por un prefiltro obstruido puede afectar el tratamiento biológico del agua.
- Los gases pueden salir por el respiradero de entrada del sistema, generando olores cerca de las tapas o del lecho de pulido.